viernes, 19 de octubre de 2012

27 de Marzo, 11 AM



Fuesen  tus  piernas  como  enlaces
entre  el  cielo  y  la  tierra.
Entre  lo  profundo  y  lo  vanal,
lo  mortal  y  lo  divino.

De  mármol  talladas  tus  facciones.
Tus  cabellos  largos  ondulando,
bailándole  de  espaldas  a  tu  cuello,
acariciando  los  contornos  de  la  calle,
desviando  mis  ojos  incrédulos.

Y así como llegas te me pierdes
con cada paso. Madre mía.
Quién  buscará  en  tus  contornos
diversión, para embriagarse de placer
en el edén entre tus piernas.

0 comentarios: